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Comenzamos nuestra reunión el pasado viernes 12 de febrero, pidiendo al Señor su mirada para no perder ningún detalle, recoger toda la riqueza del encuentro con cada comunidad local, agradecer la generosidad de las respuestas...
 
Y sobre todo para pedirle su luz en la elaboración del documento que recoja toda la diversidad de nuestra misión comunitaria.

Sentimos un profundo agradecimiento por estos meses de contacto con las comunidades locales (lamentando que no hayan podido ser encuentros presenciales), puesto que con las entrevistas hemos sentido con mucha fuerza eso de que somos una única comunidad pero con infinidad de dones y misiones con las que llegamos muy lejos. 

Desde la comunidad más pequeña hasta la más numerosa nos habéis trasladado mucho cariño, ilusión y energía para asumir este proceso. 

Por nuestra parte asumimos el encargo con responsabilidad y confianza en el Espíritu que esperemos nos guíe durante todo este tiempo.

Añoramos poder veros y abrazaros. De momento soñar, estamos soñando juntxs y a lo grande.

Besos agradecidos y confiados.