Porque no quiero mantenerme indigente
con las noticias del olvido humano,
que nos dan cifras, cuadros, resultados
de personas descartables.
Porque me urge estar más cerca de los míos
siguiendo el rumbo de las cientos de razones
de los que aman y se entregan sin medida
que no transan, que no olvidan.
PORQUE AMO LA VIDA,
PORQUE QUIERO EN MI TIERRA UN NUEVO DÍA.
PORQUE QUIERO AL FIN ENTRAR
POR LAS PUERTAS DEL MAÑANA CONSTRUYENDO EL PORVENIR.
Porque no es bueno, ni es razonable
que no haya cariño para el frío,
que envuelva la pena y el llanto, que los vuelva soportables.
Porque quiero que me encienda y es posible
que el grito de “hacemos milagros”
por lograr del corazón un paraíso, sea fuerza, un instrumento.
Porque no es justo, ni es necesario
que haya tanto sufrimiento suelto.
Con hambres y violencias maquilladas como signos de futuro.
Y me niego a entrar en el milenio sin vivir mi suerte en compañía
con aquellos de suertes parecidas,
masa inmensa, impacientes.
con las noticias del olvido humano,
que nos dan cifras, cuadros, resultados
de personas descartables.
Porque me urge estar más cerca de los míos
siguiendo el rumbo de las cientos de razones
de los que aman y se entregan sin medida
que no transan, que no olvidan.
PORQUE AMO LA VIDA,
PORQUE QUIERO EN MI TIERRA UN NUEVO DÍA.
PORQUE QUIERO AL FIN ENTRAR
POR LAS PUERTAS DEL MAÑANA CONSTRUYENDO EL PORVENIR.
Porque no es bueno, ni es razonable
que no haya cariño para el frío,
que envuelva la pena y el llanto, que los vuelva soportables.
Porque quiero que me encienda y es posible
que el grito de “hacemos milagros”
por lograr del corazón un paraíso, sea fuerza, un instrumento.
Porque no es justo, ni es necesario
que haya tanto sufrimiento suelto.
Con hambres y violencias maquilladas como signos de futuro.
Y me niego a entrar en el milenio sin vivir mi suerte en compañía
con aquellos de suertes parecidas,
masa inmensa, impacientes.