Ser-en-relación.
Nos definimos como ser-en-relación (1) y en cómo nos relacionamos con los
distintos ámbitos en los que estamos inscritos, los llamados contextos, para
dar respuesta a las necesidades básicas surgen nuestras distintas culturas, esa
forma de interpretar la realidad desde unos códigos establecidos en la
comunidad desde y en la que nos relacionamos. Estos contextos desde los que
vamos interpretando nuestra realidad según los códigos recibidos es lo que va
constituyendo nuestra identidad, siempre en evolución, debido a la libertad con
la que nos situamos ante la realidad y reformulamos los significados (2). Por
ello podemos decir que en nuestra identidad tenemos múltiples pertenencias, es
decir, distintos códigos interpretativos, aun no siendo consciente de ellos.
Sin embargo, por ese efecto nuestro también de “ser en libertad” podemos decir
que los contextos que conforman la realidad, y ante la que nos situamos, pueden
ser condicionantes pero no deterministas, porque siempre tenemos la capacidad
de darles un significado distinto. Ejemplo de ello lo podemos ver en los dos
puntos siguientes.
Sobre
el DNI de Jesús. Si
hiciéramos un breve ejercicio de los datos que aparecen en el DNI podríamos
darnos cuenta que en realidad esconden un trasfondo que va más allá de unos
posibles datos asociados a un número. Si leyéramos el DNI de Jesús, podríamos deducir
rasgos identitarios descifrados de los distintos contextos en los que vivió. Su
nombre sería Yeshúa bar Yosef en arameo, donde Yeshúa significa “Yahvé salva”,
y “bar” indica “descendiente/hijo de”. Este contexto semiótico muestra por una
parte, una sociedad patriarcal, en donde la identidad proviene del clan
familiar, y por otra parte, revela también la esperanza del pueblo judío de
aquellos días, de liberación de la ocupación extranjera y la instauración de
una nueva era en que se invirtieran las tornas y empezara a reinar la paz, la
justicia y la compasión, como cantaban ya los profetas del destierro en
Babilonia (contexto histórico). Por otra parte, aparecería que su lugar de
residencia sería Nazaret, una pequeña aldea de la Baja Galilea próxima al lago
de Genesaret (contexto geográfico). De su capacidad de observar la naturaleza y
las escenas de la vida cotidiana tomará las imágenes para la construcción de
las parábolas con las que hacer llegar su anuncio del Reino de Dios, muchas de
ellas referentes a la sociedad agraria (contexto social) en la que vivía,
gracias a la abundancia de agua, la fertilidad del suelo y la suavidad del
clima mediterráneo (contexto climático).
La
mujer sirio-fenicia (Mt 15, 21-28; Mc 7, 24-30).
Jesús tuvo una experiencia fundante en el desierto. Frente al bautismo de
conversión y perdón que predicaba Juan como forma de un nuevo comienzo en el
que la gente disfrutaría de una vida más digna en una sociedad tan injusta,
restableciéndose así la Alianza rota por el pecado de todo Israel; Jesús va a
anunciar a un Dios compasivo y misericordioso cuya fuerza salvadora ha llegado
ya para implantar su Reino de vida y paz, porque es Padre de un amor
desbordante, y Padre de todos, especialmente, de aquellos que nadie defiende. A
partir de entonces es un hombre libre frente a todos estos contextos que
marcaban la cultura de su sociedad y lo que se esperaba de él. Así, su familia
será ahora la formada por todos aquellos que busquen la voluntad de Dios, y su
oficio, su pasión, el anuncio del Reino de Dios en obras y palabras (3).
Dentro de los encuentros
del Señor podemos destacar el encuentro con la mujer sirio-fenicia por su repercusión.
En este encuentro, ella fue maestra, le enseña el camino de su mesianismo,
anunciar ya el Reino también entre los gentiles. Jesús concentraba su actuación
en el pueblo judío, Dios venía a liberar a su pueblo de tanto sufrimiento y
opresión (3); sin embargo, este pasaje acentúa fuertemente la apertura al mundo
de los gentiles. Esta mujer sirio-fenicia representa el principio hermenéutico
de la misión de Jesús, representa a toda la humanidad sufriente (4). Este
encuentro provoca en Jesús, siempre en diálogo con la realidad, una amplitud de
la conciencia de su misión. Como se apuntaba al principio, un claro ejemplo de reformulación
de significado ante un nuevo contexto, e incorporación de un nuevo código
interpretativo en la forma de ser y actuar.
Múltiples
pertenencias. Como personas, estamos constituidos por
múltiples identidades, cada una perteneciente a rasgos de distintas culturas
que nos configuran y vienen dadas (identidad) o que elegimos (identificación)
en el proceso continuo de intentar explicarnos lo que sentimos, vivimos y
queremos vivir. La amalgama de estas múltiples identidades es la que nos hace
ir diferenciándonos y adquiriendo una individualidad única pensada. Estas
múltiples identidades se van adquiriendo y revelando en el contexto cotidiano
(2). El problema de la identidad surge cuando no reconocemos esta multiplicidad
de identidades que nos constituyen, sino que nos asociamos con una de ellas,
con la que nos sentimos más amenazada (5). Esta es la raíz de una gran fuente
de conflictos actuales y persistentes tales como los nacionalismos excluyentes,
el revisionismo indígena, el integrismo religioso… Nuestro contexto actual es
el de una sociedad intercomunicada, en el que lo local afecta a lo global y
viceversa, con retos comunes, y en la que hay que ver cómo es posible articular
esta sociedad en la que como en el pasaje de la mujer sirio-fenicia, todos nos
podamos sentir invitados a un banquete en el que todos podamos compartir el
mismo pan, y no solo las migajas. Pero ello implica en primer lugar, un examen
de nuestra identidad y reconocer que no es que vivamos en una sociedad
multicultural, sino que nosotros mismos lo somos. Un examen de nuestra
identidad, de nuestro DNI, y como Jesús, dejándose afectar y sabiéndonos con el
poder de reformular significados a la luz del Evangelio.
Tomás Undabeytia
Equipo Misión Espiritualidad
Referencias
(1). “Eutanasia y periferias”.
Abril 2021. Equipo Misión-Espiritualidad CVX.
(2).
Lola Arrieta. Equipo RUAJ. “Contextos y culturas, su importancia en el
Acompañamiento”. Seminario de Acompañamiento en la vida cotidiana. 2019.
(3). Pagola, J.A. “Jesús.
Aproximación histórica”. Editorial PPC, Madrid. 2013.
(4). Pernett Beltrán,
A.B. “El encuentro de Jesús con la mujer griega, sirofenicia de nacimiento, en
Mc 7, 24-30. Hacia una lectura bíblica sobre los excluidos hoy”. Pontifica
Universidad Javeriana, Bogotá. 2017.
(5). Maaluf, A.
“Identidades asesinas”. Alianza Editorial, Madrid, 1999.