20 de junio - Día Mundial de las Personas Refugiadas

“No se trata de compartir una carga, sino de compartir una responsabilidad mundial, basada tanto en la idea general de que todos somos humanos como en las obligaciones muy específicas contraídas en virtud del derecho internacional. Los problemas fundamentales son la guerra y el odio, no las personas que huyen. Los refugiados se cuentan entre las primeras víctimas del terrorismo.” (António Guterres, Secretario General de la ONU)

En 2001, con motivo del 50 aniversario de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, la Asamblea General de Naciones Unidas designó el 20 de junio como el Día Mundial del Refugiado para recordar a millones de personas desarraigadas en todo el mundo.
Desde entonces, todos los 20 de junio el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ONGs e instituciones públicas y privadas tienen presente la realidad de los más de 34 millones de personas refugiadas y desplazadas internas que viven en el mundo, y que se han visto obligadas a abandonar sus hogares. Mediante la celebración de distintas actividades formativas, culturales y lúdicas en las que participan los propios refugiados, se rinde homenaje a quienes, con fortaleza y esperanza, superan enormes dificultades para rehacer sus vidas tras huir de la violencia, la guerra, la persecución y las violaciones de derechos humanos.
Desde todos los rincones del planeta decenas de miles de personas se unen cada año a las celebraciones de ACNUR para reconocer la contribución de los refugiados a la sociedad y tender puentes entre quienes huyen y quienes les acogen.
En el marco de este día, las organizaciones del Sector Social de la Compañía de Jesús de la Provincia de España, unidas para la promoción de una cultura de solidaridad e inclusión de las personas migrantes y refugiadas, celebran durante este mes de junio caminatas comunitarias en el territorio español en favor de la hospitalidad, la cooperación y la acogida.
La iniciativa, denominada Caminos de hospitalidad, implica recorrer rutas simbólicas entre las personas migrantes, refugiadas y el público en general, que sirvan de lugar de encuentro, fraternidad, y celebración. Caminos de Hospitalidad está inspirada en el trabajo del Padre Frans van der Lugt SJ en Siria, quien solía organizar caminatas con personas de todas las religiones y nacionalidades, como un espacio de encuentro intercultural.