“Al cumplirse el día de Pentecostés, estaban todos juntos”

 


Y aunque cada uno hablaba su idioma, tenían su pasado y habían superado su sufrimiento de distinta forma, todos hablaban el mismo idioma, el idioma del amor.

Amor que se notaba en cada uno de ellos, en cómo cuidaban al resto, Pepe había preparado la excursión con todo detalle, Marisa nos alimentaba con todo lo que había traído y cargado en su mochila, Iciar nos preparaba la oración, Patrizia nos compartía su alegría, Mamen y Eduardo nos compartían su acompañamiento y sus preocupaciones, María nos escuchaba y animaba a todos.

Todos nos acordábamos de Pilar y Blanca que no habían podido acudir.

Y Dios cuidaba de todos y nos bendecía con un magnífico día, y el Espíritu soplaba en forma de brisa que nos permitía abrir los brazos para abrazarle. 

Pasaron un día de compartir y disfrutar la vida, un día de agradecer  la inmensa generosidad de aquellas personas que les habían acompañado y ayudado en ese camino de ruptura, en esa experiencia de vida que les había hecho mejores personas y por lo que ahora ellos estaban dispuestas a acompañar el sufrimiento de los demás, y formar parte del equipo de 4 estaciones de Zaragoza.

Con la ilusión de hacer llegar esta magnífica experiencia a toda persona que la necesite.

                        4 Estaciones

                        CVX en Zaragoza