El domingo 22 de
julio de 2018 estará marcado por el comienzo la XVII Asamblea Mundial de
la Comunidad de Vida Cristiana (CVX). En esta oportunidad, se desarrollará
en el Colegio Máximo de San Miguel (Centro Loyola), Provincia de Buenos Aires.
Hacía 20 años que no se celebraba una Asamblea Mundial en América Latina
(Itaicí 1998).
En
mayo de 2016, el Presidente de la CVX Mundial, Mauricio López, convocó al
cuerpo apostólico a reunirse en Buenos Aires para celebrar juntos la Gracia
Jubilar de nuestros primeros 50 años de camino (1967-2017). Invitación que nos
anima a adentrarnos en el misterio del Dios presente en el mundo y en nuestro
camino como CVX, “…sabiendo que
todavía queda mucho por escribir y muchas dudas por resolver, pero dejándonos
llevar por ese llamado a unificarnos dentro de este proyecto universal de
reino.” (Carta N°4 del Presidente a la comunidad mundial
CVX).
Es
por eso que para esta Asamblea, en la citada carta del Presidente a la
comunidad mundial CVX, se nos da a conocer el tema elegido: “CVX, un regalo para la Iglesia y para el mundo”.
Queriendo ser una verdadera Iglesia y CVX en salida, movidos por el Espíritu
del Vaticano II y la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, del Papa
Francisco.
El
pasaje de la Escritura elegido nos habla de un proceso de conversión y de
respuesta acogiendo la Gracia de Dios recibida: “¿Cuántos panes tienen? Vayan a ver” (Marcos
6,38). La
Gracia que pedimos al Señor en nuestra Asamblea es: “Deseamos mayor profundidad e integración en la
vivencia de nuestro carisma CVX en el mundo de hoy”.
Confiar en todo lo que nos ha sido dado ya, vivirlo en plenitud integrada desde
nuestra comunidad, espiritualidad y vocación apostólica, y donarlo al mundo.
Este
proceso de preparación, que comenzó a mediados de 2016, se va haciendo cada más
intenso a medida que se acerca el inicio de la Asamblea. El Equipo ARUPÁ –que
en guaraní significa “Traigo Todo”–, integrado por Argentina, Uruguay y Paraguay, como comunidades
anfitrionas y corresponsables en la organización de la Asamblea,
lo está viviendo en un clima de alegría, agradecimiento y responsabilidad por
la misión encomendada.
Cada
uno de los colaboradores, desde sus distintas áreas –Acogida y Servicios,
Traducción, Liturgia, Finanzas, Ambientación y Diseño, Recreación y
Comunicación– busca estar en todos los detalles para que la Asamblea sea un
verdadero encuentro de delegados que, animados por el Espíritu y en actitud de
Discernimiento, puedan elegir los caminos que el Señor invita a recorrer. Como
órgano supremo de gobierno de la CVX, éste es uno de los propósitos de la
Asamblea.
En
las próximas semanas iremos compartiendo con ustedes otras propuestas que les
acerque, un poco más, esta Asamblea que para la CVX Mundial, y en particular
para la CVX en Argentina, en Paraguay y en Uruguay, adquiere una dimensión muy
importante que es para agradecer y vivir con alegría.
Animamos
a todos que nos acompañen con sus oraciones.
Publicado en
la página web de la Provincia Jesuita Argentino-Uruguaya: http://jesuitasaru.org/xvii-asamblea-mundial-de-la-comunidad-de-vida-cristiana/