Resumen de lo vivido en las Pascuas MAG+S 2018

Esta Semana Santa, más de 25 jóvenes de la CVX Padre Arrupe (Madrid) hemos participado en alguna de las Pascuas ofrecidas desde la Oficina de Pastoral MAG+S.

Desde Javier, Madrid, Melilla,... hemos compartido con otros jóvenes adultos de toda España la Pasión, muerte y Resurrección del Señor.

Han sido días para dar gracias a Dios, por entregarse a nosotros y amarnos hasta el extremo y también por poder vivir este tiempo en COMUNIDAD. Una comunidad que no es sólo la local o la CVX, sino la comunidad formada por tantos jóvenes de distintos orígenes que creemos que seguir a Jesús y el Evangelio tiene sentido en nuestros días.
Unos hemos participado de unos días de peregrinación hasta Javier. Salimos 20 peregrinos desde el colegio de jesuitas de Pamplona sin saber muy bien por dónde iba el camino y cómo iba a ir todo pero con muchas ganas de llenar nuestros corazones de kilómetros y sobretodo de buen compartir. Nos daban miedo las ampollas, la lluvia, el frío pero sabíamos que íbamos muy bien acompañados. A cada pueblo al que llegábamos, primero Urroz y después Lumbier, los habitantes nos recibían con los brazos abiertos y con ganas de hacernos partícipes de su manera de vivir la Semana Santa, cantando, velando e incluso sacando los pasos del Viernes Santo. Hemos tenido momentos de silencio, momentos para mirar nuestros fracasos, momentos de compartir como los discípulos de Emaús y momentos de maravillarnos con el mundo que nos rodea. Ha sido un camino hasta Javier donde el grupo nos hemos hecho uno. Al llegar a Javier nos unimos a ellos para celebrar lo más grande, una Vigilia Pascual preciosa, muy cuidada que culminaba con la alegría del Resucitado.   

En Javier nos reunimos un grupo de 80 universitarios y jóvenes adultos, donde hemos podido disfrutar de 4 días de convivencia, oración y sobre todo, encuentro con Dios. Fue muy esperanzador encontrarse con peregrinos que acudían a Javier entre esos nubosos días, sabiendo que todos teníamos algo en común, Javier nos llama a vivir la fe. Además, esta experiencia fue un periodo de sanar cicatrices y como no, el momento más significativo y enriquecedor para todos los cristianos, la resurrección, como renovación y reconciliación con Dios y con nosotros mismos.

Madrid ha sido el lugar elegido por otro grupo, que hemos decidido vivir la Pascua en el barrio de Entrevías. Un barrio con gran diversidad cultural. Más de 30 jóvenes de toda España hemos podido vivir el misterio de la resurrección en un ambiente de sencillez. Durante el triduo nos acompañaron las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, que nos han abierto las puertas de su casa y de su colegio;  han cuidado cada detalle de la Pascua, desde las oraciones, los momentos de compartir, las comidas y las actividades. En estos días hemos podido convivir con la gente del barrio, conversar, realizar diferentes servicios, compartir vida....; nos han acogido en sus parroquias para celebrar los Oficios y el Via Crucis de Viernes Santo, nos han hecho sentir como en casa y nosotros solo hemos puesto nuestra presencia y nuestras ganas de vivir una Pascua en Comunidad. Todo esto nos ha ayudado a sentirnos más cerca de Dios, junto con el resto de la Iglesia, y  a vivir con mayor firmeza estos días.
Y otros hemos estado en Melilla, conociendo la dura realidad de frontera sur. Hemos compartido con personas extraordinarias que entregan su vida incondicionalmente a los que tanto sufren allí, nuestros hermanos migrantes. Este donarse a los demás nos ha mostrado la resurrección y nos ha alimentado la esperanza de que un mundo mejor es posible.

Estas intensas experiencias en los distintos lugares nos hacen volver a Galilea cargados de esperanza, de fuerza, de preguntas, y sobre todo con ganas de contarle a todo el mundo lo que hemos vivido.