Concierto en Valladolid de Emilia Arija a favor de Entreculturas en Haití

Un concierto solidario a favor de los proyectos educativos de Entreculturas en Haití congregó el sábado 18 de febrero en la Sala Borja a cientos de amigos del entorno de la Compañía de Jesús de Valladolid. La cantante Emilia Arija, también miembro del Coro de Nueve y Cuarto, contó con colaboradores de Valencia para interpretar su disco Imperfecta, 14 canciones compuestas por amigos de la cantante. El colegio Mayor Menéndez Pelayo, el CAPA, el Centro Loyola ofrecieron la insfraestructura necesaria para que a los músicos y al equipo técnico no les faltara nada. La acogida fue enorme: en el patio de butacas, jóvenes del Centro Loyola, que ayudaron a cargar y descargar el equipo y acogieron a los músicos con una cena después del concierto. Gente de CVX, de los Grupos de Oración del San José, profesores y alumnos del San José y Cristo Rey. Una llamada y una respuesta que convirtió el concierto en toda una fiesta donde compartir con alegría el sueño de una educación para los niños y niñas de Haití.
 
Colaboró en la puesta en escena Cova Bayón, con imágenes sugerentes de los temas que cantaba Emilia. Y al escenario se subió Elena López, que acompañó con su voz a la intérprete de este disco colectivo, como ella lo define. Impefecta se fraguó desde el principio como un trabajo con fines sociales: todos los beneficios están destinados íntegramente a programas de desarrollo. La productora, Assisi, se hizo responsable de los gastos de producción y una vez sufragados, los beneficios van destinados a otros proyectos, “porque es lo justo y porque yo no lo necesito”, dice. Con su donación a los programas de Entreculturas en Haití ella responde a su compromiso de “dar la vuelta a este mundo” desde la educación: “Dar la oportunidad de un futuro y permitir que los niños sean niños”. La ONG jesuita ha intensificado su labor en este lugar del mundo a raíz de los efectos devastadores del huracán Matthew en octubre de 2016 para mantener abiertas las 17 escuelas con 4.000 escolares de su socio local Fe y Alegría.