Estamos justo en
medio del tiempo de las murmuratio. Lo que más sorprende cuando uno
conoce por primera vez cómo funciona la Congregación en estos cuatro días, es
la peculiar forma de conversar sobre candidatos para el cargo de Superior
general. Los electores hablan entre ellos, pero no en grupo, sino de dos en
dos, y sin lista previa. Y más interesante aún es saber que, para los miembros
de la Congregación, lo primero y fundamental es el espíritu de oración que
marca estos días.
La dinámica de la Congregación, que hasta hace unos
días había girado en torno al Aula, ahora se mueve en torno a
la conocida como “Cappella Borgia,” el verdadero corazón de las murmuratio,
donde el Santísimo está expuesto en todo momento para la continua oración
de los electores. Noche y día, los electores se acercan allí y sopesan, en
un ambiente de silencio, la información que han recogido durante sus
conversaciones. Por la tarde, todos se reúnen en esta capilla para orar juntos
según la forma de oración tradicional que se llama Adoración del Santísimo
Sacramento.
Tras un sencillo y profundo canto de Taizé, la
congregación en conjunto reza una preciosa invocación al Espíritu
Santo seguida de un largo rato de silencio que sólo se ve interrumpido por
esporádicos cantos del conocido “Adoramus te, Domine.” La Adoración termina con
el Tantum ergo, y el Salve Regina.
Durante estos días, invitamos a quienes están unidos a
lo que está sucediendo aquí, en Roma, a vivir en el mismo espíritu de
oración. Para unirse a los electores, se puede visitar la “sala de
oración” (clic aquí); donde se encuentran los textos y videos de las
oraciones de la mañana. Quien quiera pueda añadir ahí su propia oración o sus
comentarios.
¡Gracias a todos los que apoyáis con vuestra oración a
los electores!
Publicado
el 11 de octubre de 2016 en la página web http://gc36.org/es/