Unidos a tantos otros ciudadanos europeos, desde la Comunidad de Vida Cristiana en
Donosti, hemos querido apoyar la reciente convocatoria de un nuevo Círculo
de Silencio. Una vez al mes, en la plaza de Guipúzcoa, junto a la Diputación,
con otras organizaciones y personas de buena voluntad, en silencio…
El movimiento de los Círculos de Silencio fue
impulsado por los franciscanos de Toulouse en 2007, por iniciativa de uno de
ellos, Alain Richard, para expresar públicamente en silencio su rechazo al
trato inhumano y degradante que ya entonces sufrían los migrantes en situación
irregular y sus familias. Rápidamente el movimiento se extendió por numerosas
ciudades y fue apoyado por movimientos como Cimade, la Red de educación sin
fronteras, CVX en Francia…
Actualmente se reúnen en Francia unas 10.000
personas de distinta procedencia, en más de 180 ciudades, una vez al mes.
Además, esta iniciativa se ha extendido por otras ciudades europeas: Ginebra,
Varsovia, Trento, Bruselas, Liverpool…
En España fue impulsada hace más de 4 años
por la plataforma A Desalambrar, y ya se han unido Madrid, Almería, Málaga,
Burgos, Valladolid, Bilbao, Vitoria-Gasteiz,…
El Círculo de Silencio es una acción
noviolenta en solidaridad con los migrantes. El círculo quiere ser un espacio
donde quepamos todos, el silencio quiere ser un tiempo de interioridad para
tomar conciencia a favor de ellos. Apelamos así a quienes hacen las leyes, a quienes las
aplican y a quienes las defienden. En un
mundo plagado de ruidos, análisis simplistas, rumores, eslóganes y prisas, hacer
silencio es un gesto contracorriente, pero al alcance de todos, una
interpelación a nuestros conciudadanos y a las autoridades.
La actual realidad hiriente y escandalosa está pidiendo
que demos una respuesta solidaria y fraterna a todas aquellas personas que huyen
de la guerra, que mueren en nuestras costas, que malviven en campos de
refugiados y en centros de internamiento…
Únete tú también.
A veces, tantas veces, sólo nos queda el silencio…
Adelaida La Casta