El pasado viernes 13 de junio, la comunidad CVX-Fórum celebramos la Eucaristía final del curso 2013-14. En esta ocasión, además de la presencia de nuestro “consiliari” Jaume Avellí, sj., también tuvimos con nosotros a Silvestre Falguera sj., el asistente para las CVX de Catalunya.
Presidía el altar la roca de conglomerado que ha sido nuestro símbolo durante todo este curso: unidos en Jesucristo desde los más variados dones que todos hemos recibido.
Junto a la Roca, la lectura de la Palabra de Dios::
Primera Lectura- Rm. 12, 1-12- “No os acomodéis al mundo presente”. Sois llamados y convocados para una misión.
Salmo 62- “El Señor es mi Roca y mi Salvación”
Evangelio- Jn 17, 1-12- “Padre, cuida en tu nombre a los que me has dado, para que sean uno como nosotros”
En la homilía, Jaume nos indicó las personas que no debían faltar en una comunidad. Bien, más que personas, los roles que cada uno de nosotros podemos llegar a representar para que crezca una comunidad fundamentada en la Roca y exhortada por el Amor.
En primer lugar, la comunidad necesita Profetas. Las palabras de los profetas sabemos que siempre son duras, difíciles de apoyar por lo que de autenticidad aportan a la vida. Así que, la comunidad necesita también un Poeta, un Cantor. Y no se trata de suavizar las palabras del profeta, sino de proclamar la Palabra desde la belleza que nace de la bondad y de la verdad. También necesita un Médico: las heridas y llagas del camino deben ser curadas para no desfallecer. Y, cómo no, se necesita alguien que presida la Comunidad, que nos guíe y nos una en el Amor.
Quizás se trate de una utopía, pero son las utopías las que nos ayudan a crecer y nos hacen, cada vez más, creadores de comunidad.
“Son tiempos recios”, como decía Santa Teresa; así que, debemos seguir en el camino, no sin antes “dar gracias por tanto don recibido”.
Se acerca la Asamblea CVX-España, así que aprovechamos la ocasión para realizar, antes de la Comunión, el envío de nuestras delegadas María Labernia y Míriam Maymó y, también, Nacho Queralt, como candidato al Comité Ejecutivo de CVX España. Fue un momento emotivo, en el que sintieron realmente la compañía y la fuerza de la comunidad para la representación en Salamanca. Pediremos ya, a partir de hoy, para que Salamanca vivifique profetas, poetas, médicos y líderes en este caminar de la comunidad CVX-España.
Y, como decía el canto de entrada: “Junts escriurem la història de la nostra llibertat”. Que nos sintamos unidos y apoyados en esta historia de salvación.
Hasta pronto. Un abrazo fraterno,
Comunidad CVX-Fórum Barcelona