Asamblea-retiro de CVX Tiberíades (Alicante)

Queridos compañeros de camino:
Es nuestra intención resumir lo vivido el fin de semana en la Asamblea-Retiro de CVX Tiberiades en Calpe. A veces los planes nuestros, no se corresponden demasiado con los planes del Señor. Pues algo así nos ha ocurrido en Calpe.
La mañana del Sábado estuvo centrada en trasmitir lo vivido en la Asamblea del Libano, descubriendo un nuevo sentido a la "A" de acompañar. Conocimos los previos a la preparación de la Asamblea nacional de Agosto en Salamanca para acabar en nuestra comunidad local revisando las  Normas de Funcionamiento Interno,...que ya tocaba.
Acompañados del lema desde las raíces hacia las fronteras pudimos ir construyendo un nuevo modo de proceder, un nuevo talante para este momento que nos toca vivir como comunidad.
Nos costo consensuar, llegar a entender, reformular, redactar... pero lo conseguimos.
A mitad de tarde los candidatos para el nuevo consejo compartimos la oración. Después de nuestra exposición solo dos personas presentes y una que no estaba en Calpe  pronunciaron un si al servicio de la comunidad para este consejo. 
El resultado de lo vivido a lo largo de la tarde-noche no fue claro ni fácil, es más, tuvimos que cortar ya tarde, porque lo único que estábamos consiguiendo era liar mas a las personas,...El cansancio incluso también la desilusión por los frutos recibidos, nos hizo flaquear dejando paso entre nosotros a cosas que no tienen nada que ver con el Señor.
El domingo comenzamos con la Eucaristía. Las lecturas, los sentimientos de gratitud, las palabras de Eliseo, nos situaron en el lugar que necesitábamos: delante del Señor como Tiberiades. Desde ahí nos fuimos a compartir la oración y a dejarnos interpelar con el corazón en la mano y con sinceridad. Pudimos hablar con Juan (persona que dijo Si y llegó el domingo) y exponerle nuestro parecer para este servicio del consejo de manera fraterna y sincera, ya que él no había estado con nosotros el sábado
Las dos personas que hemos dicho si al consejo hemos sido Ana Zapata y Nuria Más. Ana, quedó pendiente de compartir con Aurelio, que no estaba en Calpe, lo vivido y lo que se le había pedido, pues fue novedoso para ella y era necesario hablarlo como matrimonio. Quedamos en esperar su contestación y caso de confirmarse,  proceder al envío.
Como veis nada fácil este fin de semana , pero muy agradecidos como cuerpo de haber crecido como comunidad. A todos nos faltaron rostros y voces,...ahora, en los grupos, los que estuvimos, deberíamos trasmitiros de viva voz lo vivido.
El resultado del final de proceso de Ana nos lo comunicaba de la siguiente forma:

“Después de compartir con Aurelio todo este largo proceso de oración os comunico que asumo la misión de formar parte del consejo, para cuidar junto con Nuria "el corazón del cuerpo" en esta etapa que iniciamos como comunidad.

Sólo deciros que ha sido un proceso intenso pero precioso, al mismo que tiempo que sorprendente para mí por el qué momento surge esta misión.

Una labor que está llamada a construir y a crear entre todos y que va a requerir que dispongamos el alma hacia la oración.

Cómo dijo Núria en Calpe ¿Por qué este nuevo talante se traduce en dos personas? :

"Sólo el amor abre caminos inesperados" es lo que me sale del corazón.”
Y como nos decía Rocío: “una parte del proceso ha acabado... ahora toca continuar y hacer realidad todo lo que hablamos en Calpe, sobre todo en ese trabajar juntos como cuerpo cuidando cada parte desde la “A” del DEAE”.
Esta carta no puede acabar sin mostrar nuestro agradecimiento a Eliseo, que deja de ser nuestro Asistente, por lo construido con nosotros a lo largo de todos estos años. Él ha sido testigo de nuestro crecimiento como cuerpo apostólico y de muchas cosas que ahora no sabemos expresar.
Con el corazón lleno de ilusión y con la esperanza de que es el Señor el que nos guía, nos despedimos de vosotros.  Os dejamos mas abajo algo que nos define a las dos como nuevo talante para este camino que ahora, si el Señor quiere, vamos a vivir.
"Pero la base de todos estos niveles de misión es la llamada primera de cada miembro CVX a vivir su vocación laical ignaciana en la vida ordinaria.
Esto significa estar presentes y ser contemplativos en la acción dentro del hogar, en la familia, dentro de nuestros trabajos, como parte de la sociedad civil, y en el marco de la vida política y cultural, viviendo un estilo de vida sencillo. Si no vivimos nuestra misión en este nivel, entonces aquello que busquemos hacer en los otros niveles será una “casa construida sobre la arena”. Si vivimos nuestra misión en este nivel que representa los cimientos,entonces construiremos sobre la roca."  (Punto 6 de la declaracion final de la Asamblea Mundial del Líbano)
 
Nuria y Ana
CVX Tiberiades