Algunas reflexiones a “toro pasado”.
Ya tenéis en este blog tres crónicas sobre los cuatro días que ha durado este curso organizado por CVX-E, Cristianismo y Justicia y el Centro Pignatelli de Zaragoza, y además un video que da idea de lo vivido estos días.
Quiero ahora como responsable por parte de CVX en la organización de dicho curso, haceros llegar una serie de reflexiones sobre la experiencia que puedan ayudar a los que no habéis asistido.
En primer lugar, la experiencia ha resultado muy positiva y aunque si se decide continuarla en años posteriores habrá aspectos a mejorar, lo más importante es que la necesidad sentida por las instituciones organizadoras de ofrecer un espacio de reflexión, diálogo y formación sobre la fe y el compromiso en el ámbito social y político, se ha cumplido con una buena participación (22 participantes entre 25 y 35 años) y resultado satisfactorio. También ha resultado positivo que hubiese momentos de formación o reflexivos, junto a espacios de diálogo entre los participantes con el testimonio de personas que desarrollan su compromiso en este ámbito, pero también momentos de silencio, interiorización y oración, pues la mística y la espiritualidad no pueden ser ajenos a la lucha por la justicia.
La participación ha sido de 22 personas, cercana al número máximo fijado de 25, casi paritaria entre hombres y mujeres, provenientes de distintas realidades (JOC, Entreculturas, Caritas, distintos centros de la Compañía y algunos con militancia en partidos políticos) ponían de relieve una gran riqueza y variedad de los compromisos que en el ámbito de lo social y político existe entre los cristianos y como la fe es para muchos estímulo y apoyo en su lucha por una sociedad más justa. De CVX solo hemos participado dos personas: yo en la organización y el compañero Jorge Emperador de Zaragoza entre los participantes, aunque algunos otros de los que participaban habían conocido de la existencia del curso a través de miembros de CVX.
Creo que la escasa participación de personas de la Comunidad nos debería hacer pensar y quizá sea un toque de atención para implicarnos un poco más en las cosas que organizamos. Este curso para CVX- E ha sido un primer paso para poner en marcha un equipo apostólico en el ámbito del compromiso socio-político. Hasta ahora tres miembros de la Comunidad vamos a trabajar en el mismo y os animo a que los que estéis interesados os ofrezcáis a colaborar en el. La convivencia, el diálogo y el intercambio de experiencias entre los propios participantes ha sido uno de los aspectos más enriquecedores del curso. En el trabajo en el ámbito de lo social y político es evidente que nos ayuda compartir dificultades, pero también esperanzas con otros que viven en situaciones muy similares a las nuestras. Nuestras esperanzas y sueños sostienen y animan la esperanza de otros y son siempre un estímulo para continuar en la tarea a veces dura del compromiso y trabajo en las estructuras sociales.
Recientemente el Papa Francisco en un encuentro precisamente con alumnos de centros dirigidos por la Compañía de Jesús animaba a asumir compromisos políticos a favor de una sociedad más justa. Las dificultades del momento que vivimos nos animan a dar respuestas valientes y generosas para intentar construir una sociedad mejor; lo político en sus múltiples variantes, desde los movimientos sociales, organizaciones de base, asociaciones que trabajen en la incidencia política…. pero también el compromiso más explicito en el partido u organización política son ámbitos de presencia y compromiso de los cristianos. En definitiva, ámbitos de objetivación y encarnación de nuestra opción preferencial por los pobres, para que ésta sea de verdad algo más que una valiosa estimación ética o una afirmación vacía.
Ha sido una primera experiencia creo que sumamente positiva. El deseo es continuarla en ediciones posteriores. Puede ser un ámbito en el que distintas instituciones de espiritualidad ignaciana ofrezcamos a la sociedad y a la Iglesia un espacio de reflexión y discernimiento que impulse a asumir compromisos reales y efectivos en este campo.
Mariano Pérez de Ayala