Curso de #FeyPolítica en Barcelona


Del 25 al 29 de agosto se ha celebrado en Barcelona el curso de Fe y Compromiso Socio-político, en el que CVX-España eramos uno de los organizadores junto a la Compañía de Jesús, el Centro Pignatelli de Zaragoza y Cristianisme i Justícia.

Crónica del primer día del curso #FeyPolitica que estamos organizando estos días junto a CVX España y el Centro Pignatelli:

Ver, juzgar, actuar. Son las tres partes en las que se divide el nuevo curso Fe y Compromiso Socio-Político. El ver de la primera jornada nos ha permitido conocer la realidad social, económica y política del país y del ámbito internacional, de la mano de Santi Torres y Salvador Busquets. Ambos proponen una alternativa a la actual situación, basada en la Declaración de Unijes (Por la regeneración democrática de la vida pública en España) y en la implantación de un modelo de democracia económica y de iniciativas relacionadas con la economía social, del bien común y de comunión. Para ello, sería necesario “un nuevo pacto social y democrático”, después de las “décadas prodigiosas” vividas en el Estado español, que han dejado, sin embargo, un país con más desigualdades sociales. Estos hechos, sumados a las crecientes injusticias y a las situaciones de opresión en el mundo, son origen de la rebelión protagonizada últimamente por los movimientos sociales, según Luis Díe, ponente de la charla compartida por la tarde y firme partidario de llevar a cabo una “revolución personal” para la cual “hay que pagar un alto precio”, del mismo modo en que Jesús conmina a cada uno a cargar con su propia cruz. Díe recuerda una frase interpelante de Zubiri: “En cada acción nuestra nos jugamos el futuro de la humanidad”. Como al inicio de la jornada, en la oración comunitaria reposan las palabras aprendidas hoy para, a pesar de todo, “mantener una esperanza que vaya más allá de tu propia biografía”. 

Crónica del segundo día del curso #FeyPolitica de la mano de Ana Vazquez Ponzone:

Segundo jornada de curso, entramos en el juzgar de la mano de Pepe Laguna, teólogo y músico, quien desde su formación y amplia experiencia cerca de las personas más vulnerables vino a compartirnos preguntas, dudas, y a invitarnos a no perder de vista la presencia de Dios en la historia. Una historia donde la novedad de Dios acontece…., y que es seguida de un presente y un futuro cuyas claves y signos podemos intentar leer desde la teología y desde la política que debiera poder explicar lo que acontece y de alguna manera hacia dónde vamos.

Pepe nos invitó como cristianos a buscar nuevos grandes relatos, aquellos que nos ayudan a caminar, a soñarnos, a defender e inventar un lenguaje que nos abra a una novedad que a veces se niega, como si todo estuviera ya dicho. Este relato tiene que tener tres miradas fundamentales: desde lo último, poner a los últimos en el centro y la utopía como horizonte.

Un horizonte, el de Barcelona, fue el que contemplamos en la tarde. Imaginamos lo que acontecía en la ciudad, personas, historias, momentos, lugares, todo bañado por un azul intenso que nos permitía juzgar desde la belleza calmada y serena de la lejanía. Luego fuimos poco a poco bajando, y sin darnos cuenta giramos a la derecha en la Rambla para adentrarnos en el universo de mestizajes, risas, olores, contrastes del Raval y allí la mirada no permitía horizontes, sino distancias cortas, realidades con rostros, nombres, vidas de personas sin hogar, inmigrantes y prostitutas controladas por otros que se encargan de sacar rentabilidad a sus cuerpos. Y al rato vuelta a una lectura teológica y política ya no sólo de los tiempos, sino del aquí y el ahora.

Una política que hay que volver a hacer de todos y todas, incorporando desde nuestros lugares en partidos políticos, ONGs, voluntariados, hospitales, escuelas una mirada política, que no es más que una mirada que ayude a destapar las causas estructurales de lo que intuimos y vemos. Y cerramos cansados y sin tiempo para un compartir conjunto, pero con cantidad de cuestiones, sentimiento, intuición de compromisos y realidades…. sin darnos cuenta, construyendo relato.

Tercera y última crónica del curso-taller #FeyPolitica:

«Ha llegado la hora de actuar, en este tercer día de discernimiento. Antes, nos disponemos, como cada mañana, al encuentro con Dios desde la oración para entender la realidad herida de nuestro mundo. Afortunadamente, no partimos de cero. Contamos con la sabiduría acumulada desde el siglo XIX a través del Magisterio Social de la Iglesia, que, según el profesor Gonzalo Villagrán, se resume en siete grandes principios que pueden guiar nuestro compromiso socio-político, un compromiso hondo que brota de la fe en el Dios encarnado: 1. Dignidad de la persona; 2. Promoción del Bien Común; 3. Destino universal de los bienes; 4. Opción preferencial por los pobres; 4. Principio de subsidariedad; 5. Participación; 6. Solidaridad. La experiencia de la injusticia con los obreros marcó este magisterio, que arranca con la Non expendit, la primera respuesta a la pregunta sobre la participación de los cristianos en la política italiana, y, ya de forma explícita, con León XIII. El Concilio Vaticano II abre un nuevo paradigma reconociendo la pluralidad de posturas cristianas en su participación política y social. Pues, en el fondo, “lo que une, en efecto, a los fieles es más fuerte que lo que los separa”: es decir, la fe en el Dios de la historia, encarnado en el Cristo que sufre con y como los pobres de la tierra, como nos ha recordado Jesús Sanz en la mesa de testimonios que ha compartido con Javier Bailén y Montserrat Tura. La exconsejera de Interior y Justicia ha sido contundente en su valoración: “La política de apaño no sirve, hace falta una política de cambio radical”.»