Pedro Bolaños, de CVX-Gran Canaria, reflexiona sobre responsabilidad y vida complicada.
No creo que la
mayoría de la gente asuma alguna responsabilidad por el deseo de complicarse la
vida. Eso, lo de complicarse la vida casi siempre sucede, pero no es el
objetivo en sí, sino una consecuencia, casi siempre inevitable.
Y cuando aparecen las
dificultades, normalmente se ponen a prueba la fortaleza de la decisión que nos
trajo a este punto y la resistencia para seguir adelante.
No soy yo de los que
piensan que hay que seguir adelante a cualquier precio, porque a veces ocurren
circunstancias que nos pueden hacernos replantear caminos tomados, pero lo que
sí creo, y además convencido de ello, que las decisiones que son bien tomadas,
suelen llevar un plus que nos hace aferrarnos a ellas con mayor energía en los
tiempos difíciles.
Si lo piensan bien,
todos nosotros somos capaces de identificar esta afirmación en nuestra propia
vida.
Se ha definido a
nuestra cultura como una cultura líquida, es decir, que como los líquidos no
tiene forma propia, sino que se adapta a la forma del recipiente que lo
contiene. Y creo que no va desencaminado este análisis.
Y si somos hijos de
esta cultura, nos estamos incapacitando para tomar nuestras opciones, para
abrir caminos, para ser personas libres y dueñas de su existencia.
Decía Mario Benedetti
que uno no siempre hace lo que quiere pero tiene el derecho de no hacer lo que
no quiere. Y añado yo que, eso, casi siempre supone tener dificultades. Y me
pregunto yo, ¿hay algo que valga la pena que no nos cueste? ¿No decimos que lo
que más nos cuesta es a lo que más valor le damos?
Por eso, si queremos
disfrutar y apreciar de nuestra libertad, sin duda, debemos ganárnosla con
esfuerzo, no porque pueda ser un derecho que se nos reconoce, sino porque es un
bien que se alcanza afrontando las decisiones de nuestra vida con
responsabilidad y desde lo que nos marca nuestra propia conciencia. Así quizá
seamos como una piedra de hielo en nuestra cultura líquida, pero capaces de
transformarla, aunque sea sólo bajándole la temperatura.
(Publicada en la web
de la Red Ignaciana de Canarias Anchieta el 2 de julio de 2013 http://www.redanchieta.org/spip.php?article1081)