Pedro Alonso, de CVX-Tenerife, nos presenta una reflexión sobre el interés y el desinterés en la relación humana.
Hace mucho tiempo oí unas palabras que en su momento me hicieron pensar y que no han dejado de inquietarme. Decía aquella persona que muy a menudo los seres humanos queremos a los demás en la medida que estos hacen lo que nos gusta. Llegamos a pensar incluso, más o menos conscientemente, que “si esa persona me quisiera debería hacer tal o cual cosa”. Subrayo lo del “debería”.
Ya les digo que
este asunto me inquieta porque toca directamente lo más profundo del alma
humana, precisamente lo que más nos humaniza que es nuestra capacidad de amar.
Y es que esto de “amar libremente” y dejar que los demás hagan lo mismo es sin
duda uno de los aspectos más difíciles del amor, entendido por supuesto como
relación de pareja pero también en general, en todas las relaciones humanas.
Verdaderamente, eso de amar a los demás tal como son y no como a nosotros nos
gustaría que fueran es una de las lecciones más importantes del arte de vivir,
ese que no se enseña en casi ningún sitio. Y por cierto, muy relacionado
también con el arte de perdonar, porque todas las personas, absolutamente
todas, nos equivocamos alguna vez y de palabra o de obra hacemos daño a quienes
tenemos al lado. Dicen que algunas de las personas más desdichadas son las que
se niegan a perdonar a su pareja o a alguna otra persona cercana, y terminan
atrapados en un mundo de amargura y reproche.
Seguramente que el
mejor ejemplo para esto lo tenemos en Jesús. El sí que amó libremente, dejó
libres a los que tenía a su lado, lo hizo sin medida y cuando entregó su vida
en la cruz, poco antes de morir perdonaba a sus verdugos. Con razón luego
escribió San Pablo en la Carta a los Corintios aquello de “El amor es paciente,
es afable; el amor no tiene envidia, no se jacta ni se engríe… disculpa
siempre, se fía siempre, espera siempre, aguanta siempre” (1ª Cor 13, 4-7).
(Publicada el 19
de julio de 2012 en la web de la Red Ignaciana de Canarias Anchieta http://www.redanchieta.org/spip.php?article977)