Del 27 al 30 de enero 2011, la CVX en Luxemburgo nos ha acogido en el 5º Encuentro europeo sobre migraciones forzosas. Desde CVX en España hemos acudido Pedro, Haydée y yo del Equipo de Migraciones y Manolo como enlace con el grupo de la ONU. Éramos 25 personas de las Comunidades de Francia, Luxemburgo, Bruselas, Italia, Malta y España, y miembros del JRS.Ha sido una nueva experiencia de Comunidad Mundial en una misma misión, un encuentro que nos ha renovado en esperanza, ilusión y fortaleza tanto por la atmósfera de amistad, convivencia y fraternidad, como por la confirmación en la fe compartida y el intercambio de experiencias de acompañamiento y compromiso de las diversas comunidades nacionales con y para los migrantes forzosos.
Pudimos escuchar de Simona la experiencia del Centro Astalli en Palermo (Sicilia) , de la red del JRS. Este proyecto de acogida, escucha y orientación a los migrantes, impulsado por la CVX local. En Malta la CVX ha puesto en marcha un proyecto de sensibilización a los jóvenes llamado « In their shoes … », en el que durante unos días los estudiantes son invitados a experimentar la incertidumbre, el rechazo, la soledad… que viven los demandantes de asilo. Asimismo, hemos podido escuchar como en Luxemburgo, la CVX está comprometida en la acogida de migrantes y en la defensa de sus derechos. Desde CVX en España compartimos nuestra presencia en el Foro Mundial de Migraciones en Quito el pasado Octubre junto con miembros de otras comunidades en Latinoamérica.
Durante la tarde del sábado pudimos escuchar las experiencias vitales de algunos refugiados de Afganistán, Kosovo, Congo, Irán, Vietnam,... experiencias sobrecogedoras de coraje, dignidad, esperanza, resistencia,…y amor a la vida y a la verdad. Pisamos tierra sagrada.
A partir de todas experiencias compartidas de unos y otros, intentamos elaborar unos mínimos criterios de acompañamiento desde la espiritualidad ignaciana. Y así estuvimos hablando de la acogida, la escucha, el discernimiento, la cercanía, el respeto, la libertad, la importancia de la Comunidad que nos ayuda a discernir, nos envia, nos acompaña y nos evalua.
Nos esperan grandes retos : a qué nos llama el Señor como personas y como Comunidad, cómo continuar en este camino iniciado hace años en una de las misiones prioritarias para las comunidades CVX en Europa, cómo coordinar nuestras acciones para ser más eficaces y llegar allí donde más nos necesitan, de forma más urgente y más universal.
Sólo me queda dar gracias al Señor y a todos vosotros en nombre del Equipo de Migraciones por poder haber asistido a este Encuentro, por haber escuchado tantos testimonios de migrantes y de amigos de otras Comunidades, por haber crecido en el deseo de vivir la dimensión mundial y apostólica de nuestra querida CVX.
Un abrazo y mi deseo de que sigamos creciendo en el seguimiento de Jesús junto a sus preferidos los pequeños.
Equipo apostólico de Migraciones
CVX-E