Convocados en el nombre del Señor y con el lema “En el corazón del mundo”se ha celebrado en el paraninfo de la Universidad de Alicante el PRIMER CONGRESO DIOCESANO DE LAICOS en la Diócesis de Orihuela-Alicante los días 13 y 14 de noviembre de 2010.
Algunos miembros de las Comunidades de Alicante (Tiberiades y Adonai) y de CVX Elche, así como de los Centros Loyola de Alicante y Elche, hemos participado activamente en el mismo. Un miembro de nuestra comunidad estaba en la organización general del Congreso, y otros miembros de CVX estaban en la organización de varios de los talleres.
Podemos decir que ha sido un regalo del Señor, una experiencia de oración y reflexión compartida con casi ochocientas personas de distintas parroquias, movimientos y comunidades de la diócesis que nos permitirá seguir avanzando en nuestra vocación.
Destacar las tres ponencias de una gran calidad que nos han ayudado a profundizar en la importancia de la vocación y misión laical. Estas han sido:
- “Reflexiones sobre ellaicado cristiano en nuestra sociedad: Una mirada a nuestra diócesis”. Francesc Torralba Roselló, profesor de la Universidad Ramon Llull (Barcelona)
- “Claves de identidad laical. Fundamentos de la vocación y misión del cristiano laico”. Guzmán M. Carriquiry Lecour, Doctor en Derecho y Ciencias Sociales
- “Cristianos laicos en el corazón del mundo”. Mª Teresa Compte Grau, Profesora de la Universidad Pontificia de Comillas
También se han realizado seis talleres de trabajo que han sido un lugar de encuentro para el diálogo y la reflexión sobre lo esencial en la vocación y misión del cristiano favoreciendo la comunión-comunicación entre todos.
- Presentar a Jesucristo aquí y ahora (Anuncio, Testimonio)
- La cultura actual: luces, sombras, retos (El Mundo)
- La Espiritualidad del laico
- Corresponsabilidad: Iglesia casa y cosa de todos (Pastoral)
- El laico construyendo y transformando la sociedad (Acción)
- Dar razón de nuestra esperanza (Diálogo fe-cultura)
Lo vivido en el Congreso nos une y nos anima en nuestra Misión para ser testigos transparentes y luminosos de la presencia del Señor en los ámbitos en los que nos movemos: familia, trabajo, educación, política, cultura… siempre con amor preferencial por los que sufren. Nuestro compromiso cristiano nos ha de llevar a vivir conforme a Cristo y a una construcción más justa de lasociedad.
Hemos sentido que nuestras comunidades son un gran don del Espíritu Santo para la Iglesia de hoy. Son necesarias Comunidades Cristianas vivas, con ímpetu misionero, que compartan en todas las situaciones el don recibido y lo propongan a los hermanos anunciando, sin temor, el Evangelio. Hay que desatar la urgencia misionera saliendo al encuentro de las necesidades del hombre y la mujer de hoy.
Mariano Cantón, CVX Tiberiades
Fotos cedidas por el Congreso de Laicos.
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