LECTURA DEL EVANGELIO SEGÚN LUCAS 23, 35-43En aquel tiempo, las autoridades hacían muecas a Jesús, diciendo:-- A otros ha salvado; que se salve a sí mismo, si él es el Mesías de Dios, el Elegido.Se burlaban de él también los soldados, ofreciéndole vinagre y diciendo:-- Si eres tú el rey de los judíos, sálvate a ti mismo.Había encima un letrero en escritura griega, latina y hebrea: "Éste es el rey de los judíos".Uno de los malhechores crucificados lo insultaba, diciendo:--¿No eres tú el Mesías? Sálvate a ti mismo y a nosotros.Pero el otro lo increpaba:-- ¿Ni siquiera temes tú a Dios, estando en el mismo suplicio? Y lo nuestro es justo, porque recibimos el pago de lo que hicimos; en cambio, éste no ha faltado en nada.Y decía:-- Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino.Jesús le respondió:-- Te lo aseguro: hoy estarás conmigo en el paraíso.
Orar en Domingo:
- Reino con marchamo de autenticidad en la cruz, por José María Maruri sj
- ¡Caramba con el rey!, por Javier Leoz
- Un reino distinto pero no para el más allá, por Fray Marcos
- Cargar con la cruz, por JAP
- Hoy estarás conmigo, por Enrique Martínez Lozano
- Jesús, punto de encuentro, por José Enrique Ruiz de Galarreta sj
- Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraíso, por Hermann Rodríguez Osorio sj