Un eco de Loyola...

"...Todavía con el “cansancio-resaca” del Encuentro de Loyola, pero muy felices y agradecidos al Señor porque, la verdad, es que el Encuentro de Familia y Espiritualidad Ignaciana ha superado, con creces, todas nuestras expectativas; nuestros hijos, los cuatro, vienen muy contentos… Ayer, a pesar del cansancio, empezamos a hablar… El ambiente creado en el Albergue, genial en todos los aspectos…hacía tiempo que no me reía tanto… El testimonio de Maria Clara y Ekke; las oraciones conjuntas de hijos y padres; lo que nos dijeron nuestros hijos a los padres el último día en el Plenario; la homilía de Paco Pepe; la visita a la Casa Natal de San Ignacio con la Capilla de la Conversión; el recorrido por los EE, desde una óptica familiar, a través de los talleres; el enorme deseo en toda CVX-E (estuvimos 110 adultos y más de 100 hijos) por “llevar lo ignaciano” fuera de nuestros enclaves tradicionales, a otros lugares, ambientes y personas; la charla de Sofía, colombiana, y Franklin, peruano, matrimonio recién casado y enviados a Roma como nuevos Secretarios Ejecutivo Mundial; las palabras que nuestro querido Alfonso Salgado, como Presidente de CVX-E, les dijo a todos nuestros hijos, y que supo recoger muy bien el sentir de todos los padres; la profunda gratitud al Comité de CVX-E, y a “los sembradores” de La Vinya, por haber tomado esta iniciativa de convocarnos por primera vez, “en condiciones de igualdad”, a padres e hijos (fue muy significativo que hubiera tres horarios “en paralelo” y llenos de contenidos, para adultos, adolescentes y niños);… y, en definitiva, el amor y la gratitud al Señor por nuestra vocación CVX, ahora más cercana y querida por nuestros hijos."

Teodoro Galache, en unas primeras impresiones a su grupo de vida
CVX-Málaga