DOMINGO XXII del TIEMPO ORDINARIO


Del Evangelio de Lucas 14; 1, 7-14
Entró Jesús un sábado en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando. Notando que los convidados escogían los primeros puestos, les propuso este ejemplo:
- Cuando te inviten a una boda, no te sientes en el puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que so convidó a ti y al otro y te dirá: "Cédele el puesto a éste". Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto. Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que cuando venga el que te convidó, te diga: "Amigo, sube más arriba". Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales.
Porque todo el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido.
Y dijo al que le había invitado:
- Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos ni a tus hermanos ni a tus parientes ni a los vecinos ricos, porque corresponderán invitándote y quedarás pagado. Cuando des un banquete, invita a los pobres, lisiados, cojos y ciegos; dichoso tú, porque no pueden pagarte; te pagarán cuando resuciten los justos.
Orar en Domingo:
- La sabiduría de no vivir para el yo, por enrique Martínez Lozano
- Lo que nos quita el hambre del Reino, por José Enrique Ruiz de Galarreta sj
- Aceptarnos comos somos, por Fray Marcos
- Sin esperar nada a cambio, por JAP
- Invita a los que no puedan pagarte, por XP