Ayer se inauguró y ya empieza el trabajo. El tema de migraciones y multiculturalismo como desafíos para una antropología cristiana es el que abre la sesión de hoy miércoles en el VIII Congreso Europeo de Migraciones, que acoge la ciudad de Málaga hasta el día 1 de mayo. El P. Javier Prades, presidente de la facultad de teología San Dámaso ha sido el encargado de desarrollarlo.
Mons. Antonio Maria Veglio, presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Emigrantes e Itinerantes, ha analizado e interpretado la tarea de la Iglesia en relación a los cambios traídos a Europa por la migración y la movilidad desde una perspectiva teológica.
Entre las conclusiones, Veglio ha destacado que "la Iglesia, frente al fenómeno de la movilidad humana, plantea cuestiones urgentes de naturaleza histórica, cultural, económica, social y política, haciendo referencia al Evangelio, el cual exhorta a los cristianos de la Unión Europea, a las Iglesias hermanas y a la sociedad civil a contribuir conjuntamente, de forma que sea otorgada una acogida humana y digna a los hombres y mujeres migrantes, a los prófugos, a los refugiados y a cuantos están involucrados en las diversas formas de movilidad. Además, la Iglesia, consciente de las tragedias pasadas, sabe que la plena integración de todas las minorías es esencial para el mantenimiento de la armonía civil y de la democracia. Sobre la base de la fe cristiana, intenta contribuir a la construcción de una Europa de rostro más humano, en la que sean protegidos los derechos humanos y los valores básicos de la paz, la justicia, la libertad, la tolerancia, la participación y la solidaridad".
Esta tarde se tratará el tema de la familia con la intervención de Monseñor Petru Gherghei (de Rumanía) y las réplicas de Gianromano Gnesotto (Italia) y Gabriele Erpenbeck (Alemania).
Tras las sesiones, los grupos de estudio se reunirán para analizar lo expuesto con una mirada más local.
En la foto, de Javier Cebreros, el Cardenal Bozani, vicepresidente de las Conferencias Episcopales Europeas