“En Jerez como en casa…”

Recién casados y llenos de ilusión, partimos de Granada para comenzar nuestra nueva vida en Jerez. Al principio, vivíamos demasiado “cogidos” con nuestras cosas, preocupaciones que no eran importantes y nos hacían gastar energía innecesaria, hasta que con el tiempo nos llegó la noticia de que aquí había un grupo que se estaba planteando conocer más la CVX y nos lanzamos a hacer acto de presencia de una vez.

Hablando en términos marineros, nos embarcamos deseosos en esta maravillosa travesía. La tripulación todavía no se conocía al soltar amarras, pero lo importante era tener un mismo rumbo fijo y una brújula que nos orientase ante cualquier desviación y nos permitiese sortear los arrecifes (se nota que tenemos el “puerto” cerca).

Desde el principio surgió una gran sintonía, un sentir y compartir todos al unísono. Cada día que nos reunimos: Inma, Jaime, Loli, Manuel Jesús, Marcelino, Pilar, Rocío, Jesús y Ana; descubrimos, conocemos y deseamos conocer más, encontramos, admiramos, acogemos, confiamos, vivimos y oramos en comunidad para llegar a ser CVX.

Ahora, tenemos el desafío de crecer, ser conscientes del camino hecho y decidirnos a seguir caminando en grupo. Cada uno de nosotros es una “piedra viva” que ayuda u obstaculiza el recorrido del grupo.

Por supuesto, agradecer a José Antonio Suffo, enviado por el Comité Regional CVX-AyC, su gratitud y disposición viniendo desde Sevilla para acompañarnos en el proceso, y ese saber transmitir tan vivamente su vocación a la CVX no desde la teoría, sino desde su propia experiencia personal. A Milagrosa Rosety también un recuerdo especial y lleno de cariño por haber abierto camino en los comienzos.

Pase lo que pase después, sea o no sea CVX, este grupo es un regalo de Dios en nuestras vidas, porque ha llegado cuando más lo necesitábamos. Nos ha hecho sentir “como en casa (la CVX en Granada), pero fuera de casa”.

Sentimos que todo esto no es casualidad: Dios nos ha convocado a vivir este proceso, a revivir nuestra historia. Para mí tampoco es casualidad que justo el grupo se reuniese los miércoles, que es mi día libre de clases, si no, me hubiera sido imposible asistir.

Un fuerte abrazo y mi oración para cada uno de vosotros.

Ana Palomo, CVX-Granada y Jerez.