Una CADENA de LUZ por HAITÍ

Ante la impotencia y la vergüenza por lo sucedido en Haití, os propongo una CADENA de LUZ por HAITÍ. Tras rascarnos el bolsillo (indispensable), tras reordenar nuestros gastos, podemos encender una luz para que no olvidemos a los haitianos. En unos días los medios de comunicación dejarán de publicar noticias del terremoto y lo peor llegará, EL SILENCIO. Mantengamos encendida esta luz, POR ELLOS, PORQUE SON LOS PREFERIDOS DE DIOS. Quizá esa luz que encendemos significa también nuestro compromiso con los pobres, los marginados, los silenciados, los escondidos de nuestras ciudades. Te invito a encender una luz y a comprometerte a descubrir en tu ciudad a todos aquellos que están ocultos, ESTÁN, pero no los vemos (o no los queremos ver). Que esta sea nuestra esperanza, HOY y SIEMPRE: ENCENDER una LUZ en la OSCURIDAD.