El fin de semana del 12 y 13 de diciembre nos hemos reunido en Málaga el Comité Regional por primera vez después de nuestra Asamblea de octubre. Ha sido un fin de semana de mucha riqueza y de mociones de todo tipo.
En los meses que han trascurrido desde la Asamblea hemos tenido una intensa comunicación electrónica y hemos empezado a tomar el pulso a las responsabilidades y las gracias de este servicio al que nos habéis enviado. Sin embargo, el contacto directo entre nosotros y la acogida, tanto de los jesuitas de la enfermería de San Estanislao como de la Comunidad de Málaga, nos tocaron a todos el corazón.
La mañana del sábado la dedicamos a conocernos más profundamente entre nosotros, cuál es nuestra realidad vital, cómo somos, cuáles son nuestras esperanzas y dónde descubrimos a Dios en nuestras vidas. Jesús nos preparó una hermosa oración que nos permitió entrar con facilidad en un ambiente de intimidad propio para el diálogo y las confesiones. Por la tarde empezamos a trabajar con las recomendaciones de la Asamblea, teniendo presentes las historias de gracia de cada comunidad local y los retos que la anterior Coordinadora nos había presentado en la Asamblea. Decidimos adoptar un método de trabajo que nos permite distinguir entre objetivos, líneas de trabajo y acciones concretas, por lo que en breve os presentaremos a todas las comunidades nuestro plan de trabajo para estos próximos cuatro años.
El sábado terminó con una concurrida y participativa eucaristía penitencial preparada por la Comunidad de CVX en Málaga, en la que mayores y niños disfrutamos de compartir entorno a la Virgen la inminente llegada de su Hijo. No faltó tampoco una amena cena comunitaria en un restaurante de Echevarría del Palo.
Con las pilas puestas y el ánimo dispuesto volvimos a sentarnos el domingo a seguir trabajando en ordenar nuestras prioridades y resolver algunas cuestiones prácticas que como novatos en esto debíamos organizar y que ya alguna comunidad nos había solicitado. Finalmente, la evaluación de la reunión nos dejó a todos un sentimiento hondo de esperanza, de ilusión y de ganas de entregarnos al servicio de nuestra Comunidad, tan rica, tan diversa y con tanta fuerza para ser apóstoles en el mundo.
No podría terminar de haceros esta breve reseña de nuestro fin de semana sin destacar lo que para todos fue una gran bendición: la acogida de todos los jesuitas mayores, y muchos de ellos enfermos, que nos hicieron en la comunidad de la enfermería. En todo momento nos atendieron con cariño y con alegría, se interesaron por nuestra labor y nos animaron a ello. Jesuitas que en otro tiempo han representado para muchos de nosotros pilares de nuestra fe y de nuestra vocación cristiana en su entrega y su fuerza apostólica, hoy le ofrecen al Señor sus limitaciones de salud y de memoria, pero nos siguen dando ejemplo de lo que significa “vivir para los demás”.
En estas fechas tan señaladas de preparación a la venida y de nacimiento de nuestro Señor, os animamos a estar atentos a los que a nuestro alrededor necesitan sentir ese contacto humano, cercano y de Amor. Como Comité Regional le pedimos al Niño que nace, que estos sean los criterios que nos muevan en estos cuatro años a vuestro servicio.
Un fuerte abrazo de estos que se siente Unidos en la Misión a todos vosotros.
Mª del Carmen García Peña (Coordinadora Regional Andalucía y Canarias)
En los meses que han trascurrido desde la Asamblea hemos tenido una intensa comunicación electrónica y hemos empezado a tomar el pulso a las responsabilidades y las gracias de este servicio al que nos habéis enviado. Sin embargo, el contacto directo entre nosotros y la acogida, tanto de los jesuitas de la enfermería de San Estanislao como de la Comunidad de Málaga, nos tocaron a todos el corazón.La mañana del sábado la dedicamos a conocernos más profundamente entre nosotros, cuál es nuestra realidad vital, cómo somos, cuáles son nuestras esperanzas y dónde descubrimos a Dios en nuestras vidas. Jesús nos preparó una hermosa oración que nos permitió entrar con facilidad en un ambiente de intimidad propio para el diálogo y las confesiones. Por la tarde empezamos a trabajar con las recomendaciones de la Asamblea, teniendo presentes las historias de gracia de cada comunidad local y los retos que la anterior Coordinadora nos había presentado en la Asamblea. Decidimos adoptar un método de trabajo que nos permite distinguir entre objetivos, líneas de trabajo y acciones concretas, por lo que en breve os presentaremos a todas las comunidades nuestro plan de trabajo para estos próximos cuatro años.
El sábado terminó con una concurrida y participativa eucaristía penitencial preparada por la Comunidad de CVX en Málaga, en la que mayores y niños disfrutamos de compartir entorno a la Virgen la inminente llegada de su Hijo. No faltó tampoco una amena cena comunitaria en un restaurante de Echevarría del Palo.Con las pilas puestas y el ánimo dispuesto volvimos a sentarnos el domingo a seguir trabajando en ordenar nuestras prioridades y resolver algunas cuestiones prácticas que como novatos en esto debíamos organizar y que ya alguna comunidad nos había solicitado. Finalmente, la evaluación de la reunión nos dejó a todos un sentimiento hondo de esperanza, de ilusión y de ganas de entregarnos al servicio de nuestra Comunidad, tan rica, tan diversa y con tanta fuerza para ser apóstoles en el mundo.
No podría terminar de haceros esta breve reseña de nuestro fin de semana sin destacar lo que para todos fue una gran bendición: la acogida de todos los jesuitas mayores, y muchos de ellos enfermos, que nos hicieron en la comunidad de la enfermería. En todo momento nos atendieron con cariño y con alegría, se interesaron por nuestra labor y nos animaron a ello. Jesuitas que en otro tiempo han representado para muchos de nosotros pilares de nuestra fe y de nuestra vocación cristiana en su entrega y su fuerza apostólica, hoy le ofrecen al Señor sus limitaciones de salud y de memoria, pero nos siguen dando ejemplo de lo que significa “vivir para los demás”.
En estas fechas tan señaladas de preparación a la venida y de nacimiento de nuestro Señor, os animamos a estar atentos a los que a nuestro alrededor necesitan sentir ese contacto humano, cercano y de Amor. Como Comité Regional le pedimos al Niño que nace, que estos sean los criterios que nos muevan en estos cuatro años a vuestro servicio.
Un fuerte abrazo de estos que se siente Unidos en la Misión a todos vosotros.
Mª del Carmen García Peña (Coordinadora Regional Andalucía y Canarias)