Amarte a Ti Señor en todas las cosas y a todas en Ti
en todo amar y servir,
en todo amar y servir.
Tu amor me ha dado vida, tu amor me ha dado ser,
de Ti me viene todo y a Ti debe volver.
Gustoso, pues, te ofrezco mi haber, mi poseer,
tu amor y gracia dame, de más no es menester.
Presente en las creaturas y activo en todo estás,
en mí, como en un templo, te dignas a habitar.
De Ti bondad y gracia me llueven sin cesar,
mi oficio ya no es otro sino servir y amar.