DOMINGO XII del TIEMPO ORDINARIO

Del evangelio según san Marcos 4; 35-40
Este día, al atardecer, les dice: «Pasemos a la otra orilla.» Despiden a la gente y le llevan en la barca, como estaba; e iban otras barcas con él. En esto, se levantó una fuerte borrasca y las olas irrumpían en la barca, de suerte que ya se anegaba la barca. El estaba en popa, durmiendo sobre un cabezal. Le despiertan y le dicen: «Maestro, ¿no te importa que perezcamos?» El, habiéndose despertado, increpó al viento y dijo al mar: «¡Calla, enmudece!» El viento se calmó y sobrevino una gran bonanza. Y les dijo: «¿Por qué estáis con tanto miedo? ¿Cómo no tenéis fe?». Se quedaron espantados, y se decían unos a otros: "Pero, ¿quién es éste? ¡Hasta el viento y las aguas le obedecen!".
Orar en Domingo:
- Comentario de José Enrique Ruiz de Galarreta sj
- “¡Maestro! ¿No te importa que nos estemos hundiendo?”, por Hermann Rodríguez Osorio sj
- Miedo a creer