V DOMINGO de PASCUA

LECTURA de EVANGELIO según JUAN 15, 1-8
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos:
-- Yo soy la verdadera vid y mi Padre es el labrador. A todo sarmiento mío que no da fruto lo poda para que dé mas fruto. Vosotros estáis limpios por las palabras que os he hablado; permaneced en mí y yo en vosotros. Como el sarmiento no puede dar fruto por sí, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los sarmientos; el que permanece en mi y yo en él, ése da fruto abundante; porque sin mí no podéis hacer nada. Al que no permanece en mí, lo tiran fuera, como al sarmiento, y se seca; luego los recogen y los echan al fuego, y arden. Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pediréis lo que deseéis, y se realizará. Con esto recibe gloria mi Padre, con que deis fruto abundante; así seréis discípulos míos.
Orar en Domingo:
- Por nuestras venas espirituales corre sangre de Dios, por José Mª Maruri sj
- Amar con obras, el espíritu de Jesús, por José Enrique Ruiz de Galarreta sj
- Yo soy la vid y ustedes son las ramas, por Hermann Rodríguez Osorio sj
- Yo soy la vid y vosotros los sarmientos, por Joseba Kamiruaga cmf
- Vidas estériles, por José Antonio Pagola